miércoles, 31 de diciembre de 2008

martes, 30 de diciembre de 2008

acupuntura, pero esta vez no consigo descansar. tengo la cabeza llena de fantasmas, besos dolorosos, besos de despedida, primeros besos de gente que amé de verdad. me siento frágil y adolescente, inmóvil, con el cuerpo asaeteado y un dolor constante en el vientre. la luz naranja me atrapa y me calienta: hoy la música de pablo es diferente

lunes, 29 de diciembre de 2008

domingo, 28 de diciembre de 2008

bego está en madrid. pasará las navidades en familia. todo entre nosotros ha sido muy difícil de un tiempo a esta parte. siento estar tan cansado de todo, pero ya no sé seguir a su lado. y no quiero sentirme culpable por ello, no. sólo quiero dormir y dormir, estar tranquilo
sueño que en la casa nueva de daniel y edurne todavía no viven ellos. que sólo hay mujeres sin pelo con el pecho consumido por el cáncer. que el día es gris y que camino hasta el mar. que llevo una dirección apuntada en un papel. que tras esa puerta sólo hay mujeres sin pelo con el pecho consumido por el cáncer. que abrazo a una de ellas hasta que desaparece en mi regazo

despierto con frío. me duele la espalda, ese pequeño dolor en el nervio ciático. sobraron macarrones rotos que recalentaré dentro de un rato. ayer por la tarde fui al cine. llovía y la sala estaba llena. el intercambio, de clint eastwood, es una visita guiada por las alcantarillas de una sociedad enferma. la chica que estaba a mi derecha se mordía el labio y suspiraba

(cambia a un niño desaparecido y un burdo engaño policial por unas armas de destrucción masiva. los que deberían protegernos ya no lo hacen y no se esconden: se saben intocables)

sábado, 27 de diciembre de 2008

día oscuro y lluvioso. las verdaderas aventuras pornográficas de john thompson en german goo girls. macarrones para comer. frío en los pies desnudos. más de lo mismo en todos los sentidos

viernes, 26 de diciembre de 2008

en la escena final de buda explotó por vergüenza, de hana makhmalbaf, bakhtay se deja caer de espaldas sobre la paja trillada y el polvo, rodeada de chiquillos que juegan a disparar sus armas sobre ella. muérete, bakhtay! si no, no serás libre, le grita abbas fuera de plano

ha llovido durante todo el día. ayer me dieron las cuatro de la mañana mirando películas intrascendentes y documentales, como aislado del mundo por una fina y protectora capa de plástico albal

muérete, bakhtay! si no, no serás libre

jueves, 25 de diciembre de 2008

hoy es navidad. hoy es un plato de sopa espesa y caliente para comer. mi hermano llena la conversación con un saco de anécdotas. vi a mis amigos por la tarde, en nuestra mesa del bar de paco. los ludópatas no descansan nunca. mañana bajan las temperaturas y anuncian lluvia. me siento extrañamente solo

miércoles, 24 de diciembre de 2008

el cant dels ocells, de albert serra, es una mierda de película. en la primera sesión del maldà hay catorce personas, yo me duermo un par de veces y al salir ya es casi de noche. las calles están llenas de gente absolutamente idéntica. para no tener la sensación de haber perdido la tarde, me compro una sudadera de color negro en el foot locker de portaferrissa. curioseo en algunas tiendas antes de coger el tren de vuelta. zapatillas y zapatos, complementos en un hipotético disfraz de persona normal. el poder mágico de las marcas. sin relación con lo anterior, pienso en cómo mengele se ahogó en mil novecientos setenta y nueve en una playa brasileña, muriendo viejo y impune. pienso en todas las cosas que vieron sus ojos. en lo que tarda un hombre en morir cuando le inyectas benzeno en el corazón. próxima estación, cerdanyola del vallès. cuando cruzo el puente sobre la autopista sé que la humedad nos acabará matando a todos

martes, 23 de diciembre de 2008

todo se desmorona. cada día sabes de alguien que se ha quedado sin trabajo. cada día las noticias, los gráficos, los expertos. cada día, sin descanso, la puta crisis

(todo termina. no hay buenas noticias que señalar. toda nuestra vida se está convirtiendo en un juego de renuncias, de conformarnos con el mínimo imprescindible. aceptamos que la monotonía y el tiempo hacen el resto: nos desnuda, dejándonos como animales mansos y vencidos el uno frente al otro. no hablo de cadenas de montaje)
la empresa para la que trabajo ha ganado el enésimo concurso al que se presentaba. así las cosas, todavía podemos seguir respirando un tiempo más. creo que todo es cada vez más incierto: sólo hablamos de nubes de polvo mientras el mundo se desmorona

lunes, 22 de diciembre de 2008

aquí sólo hay agua fría para respirar. si entornas los ojos y te mueves lentamente, puedes ver la humedad cayendo en las calles a oscuras. puedes verla empapando el alma de las personas hasta pudrirlas, hasta hacer que no sonrían nunca más. ni qué decir tiene que hoy el frío es un tsunami infinitamente lento y voraz

domingo, 21 de diciembre de 2008

a las cuatro de la mañana dan documentales de esos de la bbc que están bien. bonitas imágenes para recordar. en otras cadenas, noticias o programas de los de pregunta idiota y llamada de teléfono. también series antiguas. el temporal en new york hace que uno no tenga muchas ganas de pasear por central park. míriam me escribe desde una biblioteca cerca del hotel. son sus vacaciones de invierno dentro de diez jerséis de lana. me pica la nariz si pienso en ella. sonrío, y es una buena señal, creo

me cuesta volver a dormir. me hago una paja, me canso y puedo volver a cerrar los ojos. dejo la televisión encendida con videos de música tipo fela kuti o alpha blondy o mierdas así. me aburren esas músicas tan coloristas y lejanas. tardo en encontrar una posición que vuelva a ser cómoda y caliente, pero al final consigo volver a dormir. siempre sobre el costado derecho, sueño con algo vago que ahora podría recordar como un teatro

(me mandó una carta antes de marchar. dentro, una foto de sus pies dentro de unos calcetines a rayas verdes. detrás, escritas con un rotulador también verde, una millón de palabras bonitas. voví a temblar, pero esta vez no supe por qué)

sábado, 20 de diciembre de 2008

ayer bebí mucho. begoña me envió un sms a las cinco y media de la mañana, diciéndome todas las cosas que no me quiso decir por la tarde. me cansa ese comportamiento, el que evita sistemáticamente el conflicto, la discusión. diciéndome las cosas por escrito pretende evitarlo, pero sólo consigue que todo empeore

esas cosas no suelen ser positivas, al contrario. a las ocho de la mañana espero algo más del mundo que una patada en los huevos. además, sería incapaz de defenderme de sus palabras porque, en el fondo, no tengo nada que decir, y eso es bastante triste

ayer bebí mucho. esta mañana he guardado todas las noticias sobre la muerte de francisco casavella que tenía en casa, en varios periódicos atrasados. recortes cuidadosamente doblados entre las páginas de un libro. un rato más tarde he puesto una lavadora y me he lavado los dientes hasta vomitar las tripas vacías. después me he sentido mejor, capaz incluso de hacer planes para
mierda, el problema es que no entiendo nada, que todo se me escapa, que me da lo mismo lo que esperes, que no quiero

cervezas y el desmorone que supone la sangre. cansancio de escuchar a la misma gente. las mismas guerras, las mismas frases, los mismos sentimientos perdiéndose en una noche de sábado

(fumo ducados.el bar de siempre. hace tiempo que no veo a cisco y pepa. hace tiempo que no me dejo llevar. hace tanto tiempo que querría una vida diferente que ahora no sé que)

viernes, 19 de diciembre de 2008

dependientes tatuados en las tiendas de moda. grandes éxitos musicales a un volumen alto. como si fuera una película, camisetas, zapatillas, mirar y tocar, elegir, pagar, firmar. la banda sonora de todo lo que eres capaz de consumir en navidad

luces blancas que dibujan copos de nieve en la fachada de el corte inglés. extranjeros sonrientes que se hacen fotos con ese telón de fondo. cámaras digitales que convierten la felicidad en megapíxeles de resolución. con el semáforo en verde, la marea humana

es la hora de la merienda de la pequeña aitana. yogur de soja a cucharaditas pequeñas. begoña y yo bebemos cocacola en el bar del hotel gravina. sólo nosotros sabemos la verdad: no somos estrictamente una familia. me siento lejos, como intentando permanecer quieto encima de una sombra que debería ser mía, una sombra que se mueve deprisa en muchas direcciones a la vez

jueves, 18 de diciembre de 2008

confidencial en letras rojas, eso es lo que pone en el sobre que guarda los resultados de la revisión médica de hace un mes y que hoy he encontrado encima de mi mesa. todos los resultados dentro de la normalidad, tan sólo una nota: la doctora montserrat vallmajó sala me aconseja una dieta baja en calorías, ya que mi índice de masa corporal está por encima de la normalidad. no he podido evitar reírme: tal y como tengo las tripas, no tener anemia es un puto triunfo. en fin, que apto para el trabajo que realizo
(sentado en una de esas cómodas butacas, ante mí está la hija de puta de patricia gaztañaga brillando como un sol a punto de estallar. la mandaría a la mierda, pero algo que no controlo me hace sonreír y responder con vehemencia a todas sus preguntas, las que cavarán mi tumba. soy el hazmerreír de la humanidad entera)

me ducho y pienso en esas cosas. me gusta sentir la sensación del gel transparente y frío cayendo en mi mano como una mierda de otro mundo

duermo mal, con la sensación de que siempre me faltan horas. sueño con un barco que se hunde en un río, con mil viejos ahogándose. las aguas son verdes y densas y yo estoy en mitad de un puente, mirándolo todo sin hacer nada. lourdes está a mi lado. tengo miedo, le digo. me toma de la mano y me lleva hasta la orilla. los muertos flotan en la corriente. dentro de poco se hará otra vez de noche pero no, suena el despertador, seis y media de la mañana, hora de desaparecer. ella me estaba hablando de ballenas

miércoles, 17 de diciembre de 2008

martes, 16 de diciembre de 2008

acidez de estómago, pero eso puede ser cualquier cosa

y las manos me huelen a tierra mojada desde hace días

y esta tarde tengo sesión de acupuntura. pablo me preguntará qué tal todo y a mí me dará pereza decirle la verdad. todo bien, le mentiré, y intentaré dormir un rato con el alma llena de agujas

(puedo estar más pálido por el frío, o por la llovizna que empezará a caer en cuanto apague el ordenador y que me seguirá por el camino)

no le contaré del ardor de estómago. tampoco del almax forte en suspensión que tomé ayer por la noche. tampoco de las diarreas escalofriantes de después. lo ponía bien claro en el prospecto, pero no lo leí. mala suerte, porque siempre lo hago. debo volver a ser más cuidadoso. la duración de la enfermedad, la persistencia de los síntomas me vuelve negligente, descuidado. la enfermedad me vuelve idiota

(estrujo el sobrecito y es como una mamada fría con sabor a menta, blanca y espesa llenándome la boca. pensé en mis amantes y en lo mucho que me han querido. me morí de pena mientras tragaba esa mierda)

lunes, 15 de diciembre de 2008

domingo, 14 de diciembre de 2008

páginas web en las que conocer gente. redes sociales en las que seguir perdiendo todo el tiempo del mundo. listados de caras con nombres sugerentes, breves descripciones, datos irrelevantes para empezar una conversación que desemboca en una ciénaga de tópicos. es como ir al supermercado hasta que tienes la cabeza llena de ofertas

(las relaciones se ponen al mismo nivel que los bienes de consumo: todo se compra, se vende, se cambia. el amor y el sexo son tan inmediatos como pagar unos zapatos o algo de comer. no le exigimos más que nuestra propia satisfacción. hoy alguien que no conozco me ha ofrecido su culo por trescientos euros. tú y todos tus amigos, los que puedan. necesito ese dinero, ha añadido. no he sabido qué decir)
isa toca el piano: sencillas piezas con las que adquirir soltura y solvencia en el instrumento. delicadas melodías de chopin y burgmüller y bach que entibian el aire. toca de espaldas a mí —estoy sentado en el sofá del estudio— y cierro los ojos mientras disfruto de ese momento dulce

le enseño a construir acordes. estructuras simples con las que jugar a poner notas. improvisamos a cuatro manos una melodía repetitiva y fácil que suena a wim mertens. nos miramos. el enorme piso huele a incienso y sonrisas cómplices
mirar por la ventana de un tren. el paisaje urbano se me antoja una enormísima selva de juegos. las posibilidades son infinitas, pero todas una variación del escondite. imagino vidas diferentes, vida mínimas, cambios de escenario y circunstancias. una especie de remake: se repiten las escenas, las secuencias, los ambientes. cambian los secundarios y el protagonista sigo siendo yo

me escondo detrás de todos los muros, en los tejados de pizarra de esas casas pareadas, en la caseta abandonada que podría llegar a convertir en un hogar. hasta podría llegar a vivir entre las vigas de esa estación, siempre a oscuras. seguro que hay espacio suficiente para ser feliz

(fui a manresa esta mañana. lloviznaba por el camino y el sol salía a ratos, convirtiendo los charcos en espejos de plata que me cegaban. le di a isa sus regalos de navidad y no me quedé a comer a pesar de su insistencia y de lo amable del día. hoy es domingo de estar en casa)

(cambié las sábanas antes de irme y puse las de color azul oscuro. esas sábanas son como caerte al mar, frías y rugosas. hoy la tele está llena de locos y tampoco me apetece ese laberinto. prefiero dormir, sí. la psiquiatría es control social, me dijo alguien)

secundarios que me acompañan en el viaje: las dos bolleras adolescentes que se bajan en terrassa est, un apeadero afortunado en mitad de la nada. cuerpos de belleza andrógina de menos de veinte años y piercings en las cejas. líneas tatuadas en el cuello

o el peruano que ha terminado pagando una multa de diez euros con ochenta por no llevar billete. apuesto a que el revisor se quedará ese dinero. apuesto a que nadie sabrá nunca de la existencia de ese tipo. apuesto a que hoy no se le pondrá dura con su novia. apuesto a que la próxima vez lo pensará mejor, eso de colarse sin haber antes contrastado las excusas para no llevar billete

o la chica gótica o la chica negra o el grupo de magrebíes que van de visita. los dos latinos idénticos. la señora a la que el revisor ayuda porque no puede bajar del vagón

mirar por la ventana de un tren, casi como el tráiler de una película. cada día que pasa hace que el juego se amplíe: yo solo contra todos. cada día que pasa, el juego se reduce: todos contra mí

sábado, 13 de diciembre de 2008

leo asfixia, de chuck palahniuk, algo entretenido y tan vacío como la gran mayoría de mierdas que leo. algo que me avisa constantemente del funcionamiento nefasto del mundo, a pesar de la insistencia de las luces de navidad en recordarme que debería estar limpio por dentro para recibir al niño dios

hace frío y sudo como un animal a punto de caer muerto. es un sábado en los que la gente pasea por el centro, mirando escaparates. cruzo el puente sobre el río, apenas dos palmos de agua sucia sobre los que hoy sería incapaz de saltar

(en la cope entrevistan a un famoso notario que ahora empieza a trabajar políticamente en el partido popular. hablar sin decir nada. de fondo, ruido de bar. grandes cosas por los toxicómanos y por los niños. grandes cosas por el mundo y la vida, que han sido generosos con él)

pienso en michel salgado. pienso en el partido de fútbol de esta noche. pienso en las cosas que me gustaría hacer si mi vida durase noventa minutos

viernes, 12 de diciembre de 2008

en marzo hará dos años que cago sangre. a la larga, ha sucedido lo previsible: mi cuerpo se ha acostumbrado a la medicación y reducir la dosis prescrita se traduce en un vuelta-a-empezar. tengo la sensación de estar caminando por un alambre que desemboca en otro alambre que desemboca en otro alambre que hasta el infinito, una suerte de telaraña borrosa que se pierde en todas las mañanas idénticas

efectos secundarios a cambio de nada: te engordas, te pica todo, estás triste todo el tiempo y tu barriga parece un puto tambor a punto de estallar. sí, con miedo a todas partes. buenas noches

jueves, 11 de diciembre de 2008

fantaseo con efímeros pececitos rojos. tendría la casa llena de vasos de cristal, de jarrones minúsculos, todos con pececitos rojos dentro, sin apenas moverse, quietos, esperando su dosis de comida dos veces al día. recipientes que compras a sesenta céntimos en cualquier bazar oriental. peces que valen un euro y medio en tiendas de animales, aburridos y fríos

me da por los peces. cada jarrón es una pecera en potencia, llena de peces asfixiándose entre los tallos de las gerberas amarillas, cada vez más quietos, respirando con dificultad, cansados, yéndose

(pienso en begoña. todo entre nosotros se desvanece, casi como esos peces que elijo tener así, escondidos, que no sé tener de otra manera)

miércoles, 10 de diciembre de 2008

animales que comen hasta reventar. animales que se espían los unos a los otros, que se observan y relamen, que se estudian mientras babean. rasco un poco de helado de vainilla y dejo que se derrita en la boca

(en la entrada del hua long hay dos guerreros de xi'an de tamaño natural. el resto de decoración es occidental y moderna, a base de madera color caoba y formas lisas y rectas. por ocho euros tienes un excelente buffet libre. comemos en silencio, mirándonos a los ojos)

la chica rusa se entretiene delante de la bandeja de cerdo agridulce. quizás está cogiendo los mejores trozos. se desnuda. no la toco. miro sus ojos azules y sus pómulos grandes, su sonrisa franca y brillante. me gustan sus caderas. la miro como miraría un cuadro de francis bacon, con la boca ardiendo. le diría: no sé por dónde empezar a mentirte
nadie ha vaciado la piscina después del verano. el agua está llena de verdina y ha bajado un palmo a pesar de la lluvia que hace semanas que cae

(cierro los ojos. me gustaría saltar la valla, desnudarme. me gustaría morirme de frío. me gustaría ver si hay peces y asustarme. gigantescas carpas chinas rozándome. me gustaría caminar descalzo sobre la hierba. me gustaría sentirme vivo)

(el agua en los trenes tiene una concentración elevada de cal y cloro. es un agua casi blanca que no debes beber. las manos quedan rugosas después de lavártelas. toallas de celulosa que queman la piel con la fricción. me lavo la cara, me despierto, me lavo los dientes, escupo. ya estamos entrando en la estación. hoy empieza todo)
a través de la ventana la llovizna cae sin caer, llenando el aire de destellos plateados. en el edificio de enfrente no hay luces encendidas. somos las únicas personas vivas en el mundo a las nueve de la noche. respiro fuerte, doblo la manta del sofá, enciendo el móvil, cambio un par de veces de canal, pienso en la chica rusa de esta mañana en el restaurante. no siento deseo. me he arrancado la polla de cuajo y la herida me cicatriza en el corazón

(aquí soy feliz. no tengo que fingir ningún papel en especial. tampoco tengo que hablar si no me apetece, ni estar haciendo cosas continuamente para darle un sentido a mi vida. aquí sé que puedo sanar)

viernes, 5 de diciembre de 2008

después de una semana en la que todo se va muriendo paulatinamente, creo que será bueno hacer una pausa. el tiempo mejora, yo agonizo y siento que ya no sé de qué mierda hablar

jueves, 4 de diciembre de 2008

no sucede nada ahí fuera. me noto próximo a la parálisis. sólo fui feliz acariciando a betty mientras dormía. el resto del tiempo tuve la sensación de estar viviendo una vida fingida, una vida con árboles desnudos y una nube de hojas secas en el suelo a medianoche

miércoles, 3 de diciembre de 2008

nieve. cristales de hielo cayendo lentamente hasta cubrir los muertos en las cunetas oscuras. tengo treinta y ocho años y siento que no tengo tiempo

nieve. todos los canales de televisión contaminados de gris y ruido rosa. tumbado en la cama, soy incapaz de mover la puta antena. bastaría un pequeño movimiento hacia la ventana, lo sé. todos hablan del empresario muerto y de la explosión de gas. todos me aburren infinitamente

martes, 2 de diciembre de 2008

daños. estoy realmente cansado. no sucede nada que me haga feliz. tengo casi todo lo que necesito y, pese a ello, vivo asfixiado. hoy ha tocado acupuntura

lunes, 1 de diciembre de 2008