lunes, 30 de junio de 2008

ayer terminé la carretera. el corazón deja de latir por un instante y a mi alrededor crece un invierno nuclear. busco información en internet. palabras, cifras, datos que se apoyan en gráficos. estadísticas que miden la muerte, la última muerte, la extinción definitiva, la que te hace escupir sangre aunque nosotros seamos los buenos

salgo a la calle. cruzo el puente que separa mi pueblo del pueblo de al lado a las cinco de la tarde. un calor asfixiante me resbala por las piernas. la luz que me hace cerrar los ojos. camino tan pesadamente que temo hundirme en el suelo caliente. me muerdo el labio inferior. si llego pronto a casa me haré una paja y beberé agua fría. el equilibrio tan soñado

esta noche hemos quedado con rafa. cena para ocho en el local. pizza y cervezas. regalo de cumpleaños. hay banderas españolas en los balcones. acabada la eurocopa, españa vuelve a ser el enemigo a vencer por cualquier medio necesario. quizás suene contradictorio, pero para mí no lo es: separo los balones de las bombas. sólo es sentido común, una pausa en la batalla

domingo, 29 de junio de 2008

mi mano derecha, por la reacción alérgica a la picadura de los mosquitos, es ahora una masa hinchada y tumefacta que apenas puedo mover. así tardaré mucho en quererme, porque en esto del amor soy diestro. mala suerte
ha acabado el partido y llueve en la terraza. vivo en un piso alto, rodeado de otros bloques y otras luces. de rodillas, me masturbo en el suelo mirando cómo follan unos vecinos. ella tiene las tetas grandes y él una máscara de animal. ella grita y yo despierto: es domingo, son las ocho, el sudor me llena el pecho de un mar salado y pegajoso

sábado, 28 de junio de 2008

no soy muy sociable, no, pero ahí estaba yo, en una cena con un millón de personas a las que no conocía ni volveré a ver. fumar, beber, comer como un cerdo. no decir demasiadas tonterías. intentar no quejarme. dejar que me piquen los mosquitos. dar dos besos y decir mucho gusto

si miras hacia el cielo no hay ni una puta nube. la luz es tibia en ese patio y las tetas de esa chica podrían matar a josé tomás en cualquier momento, así que mejor intento no pensar

el movimiento de la hierba cuando sopla el viento. las canciones que alguien pone. las chicas que bailan. lo lejos que estamos del mundo ahí, en tiana. las churras y las merinas

(irene se va a nicaragua, y esta es la excusa de sus amigos para una cena sorpresa en casa de ya-olvidé-sus-nombres)

viernes, 27 de junio de 2008

ahora tenemos una legión de idiotas de rojo y amarillo que cantan un viejo éxito de manolo escobar, dando saltitos para animarse los unos a los otros. para ellos no existe la crisis a pesar de sus vidas de mierda, y su democracia rueda perfecta, exactamente igual que un balón cuesta abajo

llueve, llueve de cojones. es algo que me alegra el día, sí. buenos días

jueves, 26 de junio de 2008

mi cabeza es un balón de fútbol. cervezas y bravas en el bar de jacobo y laura con el sr. linares. nuestra filiación ideológica puesta en duda por un partido de la eurocopa. tócate los cojones. sí, españa se ha comido a rusia, una rusia parecida a la que se comió a holanda. la del otro día era naranja, pero la de hoy es gris, del mismo gris del polvo. el resto es para gruñir. gente que confunde una pelota con un estado. nadie más que yo quiere una bomba, pero no, ahora no toca. o sí toca, pero no con esa excusa

betty ladra. hay petardos, hay cohetes, hay luces en el cielo y banderas en las calles. y claxons hasta que uno se aburre. le acaricio la barriga mientras jadea. no pasará nada, te lo prometo. que me muera si no

miércoles, 25 de junio de 2008

martes, 24 de junio de 2008

montones de jaulas llenas de animales que son yo. estoy acabando el animal moribundo, de philip roth. quizás sea lo que menos me gusta de lo que he leído de él. tres o cuatro libros a la vez y ninguno en serio. calles llenas de cuerpos imitándose los unos a los otros con dedicación. juegan a quererse, a bailar, a gritar, a mirar sin interés unos escaparates de rebajas. cambio nerviosamente de canal. marco un número de teléfono que nadie descuelga. david berman —el cantante de los silver jews— haciendo de violador asesino en el capítulo de ayer de csi. me corto las uñas hasta hacerme sangre. me rasco los brazos como si fuera un yonqui. hiervo verdura para mañana. pienso en las cosas que me unen a los demás. buenas noches
terminé jamilti y empecé la carretera. el día es tranquilo y fresco. bañé a betty esta mañana y ahora es un perro nube de color café. he comido un bocadillo de mortadela hace un rato. me noto desorientado. mañana empieza el horario de verano en la empresa en la que trabajo. de ocho a tres y las tardes libres. los días se secan y se caen del calendario

ya no sé qué más decir

lunes, 23 de junio de 2008

noche de verbena, noche de quedarme en casa. he fantaseado durante todo el día con la idea de salir, pero al final me puede el pánico y me encierro. busco cualquier excusa y tiro la llave. suenan cohetes. betty está medio atontada por el calmante que ha tomado hace un rato. estoy grabando csi, pero por hacer algo. buenas noches
me he levantado temprano, como cada día. las siete es una buena hora para dar tumbos por el piso en penumbra. betty ha vomitado esta noche, así que he limpiado su manta y la he metido en la lavadora. ahora está centrifugando. me rasco los sobacos y la ingle. me apetece salir a la calle. las mañanas tienen sombra en el bar de paco

el sábado compré jamilti, de rutu modan. me gusta cómo dibuja. también compré la carretera, de cormac mccarthy. no he leído nada de él, pero me llama la atención. y también fui al cine solo, algo que tenía casi olvidado. intento sobreponerme a lo que más marca mi vida, las ausencias, pero me cuesta

también compré dos camisetas, una rosa y otra naranja, en el springfield que hay a la entrada de las ramblas. he desayunado una lata de alcachofas. me he masturbado con un recuerdo. no sé, podría seguir y sólo conseguiría empeorar. buenos días
eurocopa y afonía y gana españa. cervezas con xurru y mohamed y el sr. linares. una televisión pequeña, tabaco a compartir. nada que ver con patriotismo barato, tan sólo empatía ante el trabajo del obrero

domingo, 22 de junio de 2008

hemos dejado el desierto y la lluvia. las gotas forman insectos en el polvo. isa detiene el coche en mitad del puente. el cielo es increíblemente azul oscuro y se funde en la distancia con el mar. gaviotas blancas vuelan bajo por encima de nosotros. vientres blancos como la espuma de las olas contra las columnas. es hermoso estar allí, un segundo antes de despertar. saltaría, sí
me he levantado hace un ratito. ayer bebí tanto que no recuerdo nada. un agujero negro en la cabeza que me impide pensar. eructo, me rasco, me sueno con la camiseta. la peor aproximación de mí mismo se tambalea por el pasillo
gus hiddink pinta la estepa de naranja. así es la noche, injusta y tensa, argh. amo a snejder a no poder más

(hablamos, pensamos, besamos, todo se hace con un trocito eléctrico deshaciéndose. adoro tu pequeño amor, begoña)

sábado, 21 de junio de 2008

trenes con retraso a las once de la noche. ayer salí un rato con ana. a veces un muro se levanta entre nosotros. bebemos cerveza en un bar infernal. un karaoke, un gordo con camiseta imperio y empapado de sudor coquetea con un latino de cabeza afeitada y llena de heridas. el gordo lleva un sombrero vaquero. el latino, zapatos de mujer. detrás de la barra, un chino borracho y con la sonrisa desencajada. una china embarazada y a punto de estallar. en el bar juanito, las cervezas tienen una capa de hielo por fuera que se deshace al mismo ritmo que nuestra conversación

viernes, 20 de junio de 2008

hoy me apetece beber mucho o drogarme o follar o ver la tele hasta quedarme dormido. la perspectiva de tener cuatro días —porque aquí el martes es fiesta y también pintamos el lunes de rojo— sólo para mí, me produce una mezcla amable de náusea y ilusión. a ver cómo salgo de ésta

jueves, 19 de junio de 2008

más sobre el límite. la línea roja dibuja un paisaje árido, antes y después de cruzarla. estoy hasta los cojones, si se puede estar hasta algo que nunca he tenido

(la tarde en el estudio se hace tediosa. dibujo y redibujo curvas. no puedo concentrarme. es como si el centro de mi corazón latiera en otra vida y yo estuviera desaprovechando todo lo que tengo)

miércoles, 18 de junio de 2008

el límite es una línea roja delante de mí. un paso más y el límite es una línea roja a mi espalda. cruzar el límite como se cruza la tierra de nadie después de la batalla. desde una esquina del mundo, mirar como empieza el verano, así, bruscamente. cansancio

en italia, putas gritonas vaticinan un tres a cero contra españa. en españa, luis enrique se acuerda del codo de tassotti. en estrasburgo, la criminalización de los inmigrantes sin papeles. periódicos hablando de la jornada laboral de sesenta y cinco horas. la congelación de sueldos para combatir la crisis. el alcalde de estepona es un ladrón de guante blanco. loida en el correo electrónico. la vuelvo a imaginar con los ojos cerrados y la boca llena de mí, moviéndose despacio. un gemido rojo y triste que es sólo suyo

martes, 17 de junio de 2008

la fotografía es de richard avedon. en ella, el joven lew alcindor años antes de abrazar el islam y convertirse en kareem abdul-jabbar. con los ojos cerrados, adoro su cuerpo perfecto

(el sol de la tarde apenas entra por la ventana. niños que juegan en el callejón un domingo a las seis. tu cuerpo atrapado en el espejo y el cielo llenándome la boca)

lunes, 16 de junio de 2008

el aire caliente de la tarde, un millón de niños jugando en un parque, el sudor que me perla la frente, las ganas de desaparecer aquí y aparecer allí, donde nadie nos vea. los árboles están preñados de bellísimas flores amarillas

(esta tarde, toda mi creatividad era un bostezo. chapurrear colores sin gracia en la pantalla. imposible hacer un trabajo en condiciones. tres horas tiradas a la basura porque soy incapaz de concentrarme)

(yolanda me habla de sus vacaciones, de su jornada laboral, de las piruetas que tiene que hacer para conciliar la vida familiar y el trabajo en la oficina. habla constantemente de su marido. nunca antes lo ha hecho, a pesar de que existe una relativa confianza entre nosotros. no es la primera vez que la imagino follando. parece mucho más joven de lo que realmente es. conozco de vista a su marido y es un gilipollas con el pelo cortado a cepillo. como ella no deja de hablar de él, cada vez que ríe la imagino con una polla en la boca, con las gafas en la mesita de noche. el ruido tembloroso de dos cuerpos que sudan. empiezo a marearme y me despido con casi mi mejor sonrisa. ella es la secretaria de un tipo que a veces me encarga trabajos de imprenta. unos euros en negro que suponen una cerveza, un libro. con suerte, unos zapatos. hoy era día de cobro)

la suma de todas las pequeñas cosas es mucho más que un todo

domingo, 15 de junio de 2008

el autobús está detenido debajo de una maraña de puentes de autopista. necesito poder marcharme de allí antes de que sea demasiado tarde. intento convencer a isa de que venga conmigo, pero ella prefiere esperar. maricas cubanos vestidos de negro deshacen sus equipajes. uno de ellos se prende fuego. los gritos me despiertan. es domingo y muy temprano, apenas las ocho. día de cambiar las sábanas, de poder cambiarlo todo

sábado, 14 de junio de 2008

estornudo mucho. me pican los ojos. hace frío en la calle. una cerveza con jaume. algunos sábados son así en el bar de paco. me gusta el sabor de la cerveza. roer los huesos de las aceitunas. saltamos de tema en tema. los tilos dejan el suelo pegajoso. quizás llueva. llevo una camiseta que hace años que no me ponía. el olor de la sopa caliente llena el piso. esta tarde hay fútbol. suecia es un país moderno. me gustaría tirarme de cabeza a una piscina y tardar mucho en salir. y caminar por la hierba. pensar en ello me hace sentir bien. dejo que un trocito de chocolate se deshaga contra el cielo de mi boca. y apago el ordenador

viernes, 13 de junio de 2008

un bar lleno de italianos cantando su himno con la mano en el pecho. la puta eurocopa de los cojones. ríos de gente en la calle en mil direcciones diferentes. la cerveza mal tirada se calienta deprisa. intento no pensar en nada aunque es inevitable. tengo la percepción de ser alguien con quien uno se puede aburrir mucho. sonrío y miro a los ojos. begoña sonríe también, muy cerca

(nos hemos visto un ratito esta tarde. ambos robamos tiempo a nuestras vidas para compartir una hora, una cerveza y palabras hechas de piel. caminamos entre la gente unidos por un hilo eléctrico imposible de romper, pero que nos impide tocarnos. miramos escaparates, intentando adivinar las cosas que nos gustan. dentro de poco hará frío y no quiero)

jueves, 12 de junio de 2008

esto de cagar sangre será un castigo divino por estar todo el día renegando de dios? por un momento, la duda me asalta y me crece en el vientre como una bomba de neutrones. buenas noches
tormenta eléctrica. soy incapaz de escribir nada, supongo que porque todo me suda la polla. si alguien me dijera que me quedan veinticuatro horas de vida intentaría follar, más que nada por hacer algo. vamos, lo nunca visto

miércoles, 11 de junio de 2008

los días terminan. esto quiere decir que la cabeza se me vuelve a llenar de mierda, que me vuelvo a hacer las pajas más tristes del mundo, que todo me cansa y que eso

que he hecho algo bonito en el trabajo, algo que cada vez me cuesta más porque cada vez estoy más viejo para todo. que también he llamado a xènia. que casi podía verla sonreír. que recordé detalles y momentos y sentí deseo, parecido al de la primera vez

que en la televisión, millones de camiones colapsándolo todo y un futbolista que marca tres goles

que tengo un móvil nuevo. que en el tránsito he desechado casi todos los teléfonos que guardaba no-sé-por-qué. que raquel me ha escrito porque los días de lluvia siempre nos ponen la melancolía del revés

y que otra paja más

martes, 10 de junio de 2008

los días terminan. cuando me doy cuenta, vuelvo a estar sentado en la silla del estudio, frente a la pantalla. y todo está bien, todo sigue bien. una copia en papel carbón. y ya no sé qué más decir
hundo los dedos en la tierra mojada y mezclo las semillas con cuidado, azules y diminutas. el abono líquido me pica en la piel rota. nombres escritos con rotulador en etiquetas blancas para diferenciar la macetas idénticas. el sol calienta el suelo de la terraza y los geranios tiemblan en sus jardineras. apenas es mediodía y acabo de llegar. sin tiempo

jueves, 5 de junio de 2008

jorge y leonor follarán toda la noche. ella se levantará de madrugada a comer galletas y lo hará sin encender la luz: con la que entra de la calle es suficiente. son coches moviéndose deprisa, semáforos que tardan en cambiar a pesar de

faltan horas. se ha hecho el silencio. estoy solo en el estudio y he ordenado un poco las cosas en el escritorio. hace un minuto estaba diluviando, pero ahora sólo solo es una secuencia de gotas mínimas que apenas moja. abro la ventana. el ruido que entra de la calle es frío, tranquilo. respiro. aquí dentro el aire es caliente y casi puedo ver cómo se escapa con fuerza hacia el cielo. ya casi está

miércoles, 4 de junio de 2008

escucho a glenn gould tocando el piano. las notas vibrando en la piel de mi espalda suenan a exilio. cualquier ciudad es buena para empezar de cero, si tienes un cero desde el que comenzar. un triángulo gris y lluvioso formado por bucarest, hamburgo y errenteria. se ha estropeado el teléfono y bajo el volumen de la música. un listado mental de cosas que querría hacer. encerrarme en una habitación a escribir. mirar por la ventana cómo ese perro de mierda le ladra a un viejo con una bolsa llena de verdura. masturbarme o follar, da lo mismo. y tirar las fresas porque apestan y están blandas

martes, 3 de junio de 2008

un rayo fulmina a pepu hernández mientras volaba hacia pekín. se me cae la luz de las manos. con diez minutos —como dijo sartre— tengo suficiente para estar hasta los cojones de mí mismo. compro el rockdelux. lecciones de ortografía en la editorial. mientras, cago una mierda sanguinolenta. es como tener grilletes en los tobillos todo el tiempo. se me quitan las ganas de todo. la gente se preocupa por mí, pero yo me veo gordo, con los ojos como pollas feas. seguimos sin correo electrónico en el trabajo. todo se ralentiza hasta el colapso. ya no copio a otros diseñadores, directamente me deprimo ante las mierdas que hago. la tele dice que seguirá lloviendo y sí, mira

lunes, 2 de junio de 2008

las palabras se quedan en la espuma que se secará en el fondo del vaso. el olor a cerveza negra y la música de barbra streisand remezclada por un hijodeputa. mesas de madera, cuadros que se me antojan viñetas de una aventura colosal. nos miramos. pienso en julio verne y en arne saknussemm. estoy —estamos— a salvo aquí, aunque ahí fuera sea el puto infierno hecho ciudad. viaje al centro de la tierra

(antes de ese momento he odiado a media humanidad. a la chica que tenía detrás de mí en la cola del fnac y su conversación telefónica. a los dos que tenía delante —ella era pelirroja y con cara de haber fumado demasiado, con los ojos muy juntos. al chico alto que esperaba ante otra caja, maricón perdido. a la señora que estaba detrás de él, con unas sandalias de tacón alto un número más pequeño. a la chica que conozco de vista y que ha entrado curioseando en las revistas. es mi turno: pido, sí, pago. guardo las vueltas en el bolsillo y salgo a la calle mientras escribo un sms. no sé cómo he llegado hasta aquí)

las palabras se quedan en la espuma y en su lengua y en sus ojos. apenas sé qué decir. todo lo que me sucede —nos sucede— es como un choque de trenes, algo que no se puede evitar por una mera imposibilidad física. reímos, caminamos, nos despedimos, se me encoge el corazón. otro día más se vuelve ceniza. además, la muerte de mike keppler me ha jodido vivo)

domingo, 1 de junio de 2008

apago la luz de la cocina y camino por la casa a oscuras hasta mi habitación. las tres menos cuarto de la mañana. enciendo la televisión por costumbre y me quedo en las noticias de la primera cadena. me caigo de sueño, pero antes me masturbo. después, me hago un ovillo y cierro los ojos

(el ruido de la lluvia en el tejado de uralita del patio de luces. he despertado a las doce. desperté antes, a las seis y cuarto, desayuné y volví a la cama. intento estar tranquilo durante todo el día. miro la pared de enfrente, recuerdo momentos aislados del fin de semana, disfruto de las cosas que suceden dentro de mi cabeza. finalmente, franco hizo pantanos que cada día están más llenos)