sábado, 20 de diciembre de 2008

ayer bebí mucho. begoña me envió un sms a las cinco y media de la mañana, diciéndome todas las cosas que no me quiso decir por la tarde. me cansa ese comportamiento, el que evita sistemáticamente el conflicto, la discusión. diciéndome las cosas por escrito pretende evitarlo, pero sólo consigue que todo empeore

esas cosas no suelen ser positivas, al contrario. a las ocho de la mañana espero algo más del mundo que una patada en los huevos. además, sería incapaz de defenderme de sus palabras porque, en el fondo, no tengo nada que decir, y eso es bastante triste

ayer bebí mucho. esta mañana he guardado todas las noticias sobre la muerte de francisco casavella que tenía en casa, en varios periódicos atrasados. recortes cuidadosamente doblados entre las páginas de un libro. un rato más tarde he puesto una lavadora y me he lavado los dientes hasta vomitar las tripas vacías. después me he sentido mejor, capaz incluso de hacer planes para