lunes, 20 de julio de 2009

doscientas setenta y dos maneras de morir ahogado, doscientas setenta y dos maneras de vivir para siempre. S y yo hemos comido juntos, algo que realmente puede hacer bonito hasta el día más mierda

(porque cualquiera sabe que no hay un lunes que no sea lodo, que caminar con los pies llenos de barro es agotador, que la ropa mojada te acaba enfermando si no se seca nunca, que el sol no sale jamás en esta península dejada de la mano de dios, que aquí los personajes de las series de televisión mueren todos en el primer capítulo, que si el río se desborda te llevará por delante, que tú nunca serás el ahogado más bello del mundo por mucho que garcía márquez y el realismo mágico)

por eso, doscientos setenta y dos equivale a infinito si lo miras a los ojos