sábado, 17 de enero de 2009

sobre un caballete, un retrato del bluesman robert johnson a medio terminar. detrás, una estantería llena de libros y vinilos y una mesa grande llena de pinceles y botes de pintura acrílica. en otra mesa, tres ordenadores, dos portátiles y una torre, y un caos de papeles escritos a mano. también un plano de catalunya y varios libros abiertos, uno encima de otro. y muchos cables por el suelo que intento no pisar

la habitación es soleada y la casa está en silencio. míriam se ha ido al curso de postgrado que está haciendo y yo me he quedado allí, en una especie de asilo. he salido a comprar el diario y he puesto la televisión en uno de esos canales en los que hay sólo videos musicales, algo que alternaré con canales de noticias durante todo el día. estoy allí de pie, en esa habitación llena de luz, y, de repente, una tristeza infinita me encharca el corazón. la felicidad también es una piedra negra