sábado, 13 de septiembre de 2008

poco a poco la tarde se hará tranquila. me gusta ver cómo se mece la ropa aún húmeda en el equilibrio de cuerdas. en una hora la luz será totalmente amarilla, llena de polvo, marcando el fin de los días

esta noche cenaremos todos juntos, con los regalos para isaac escondidos debajo de la mesa. jugamos a querernos, sí, y fin de la pamema