domingo, 13 de enero de 2008

en el sueño, conduzco lentamente por un pueblo pequeño, de calles estrechas y casas con balcones llenos de flores. es de noche y hay gente vestida de blanco tendida en la calzada, en posición fetal. paso por encima de ellos sin atropellarlos, esquivándolos. a veces me tengo que subir a la acera con cuidado. me detengo frente a una casa y entro por la puerta entreabierta. en la cocina, cubos de plástico con agua limpia y fría. me agacho y bebo como un perro hasta saciar mi sed

despierto. esta vez sí, ya es de día y la luz empieza a quemarlo todo