lunes, 9 de febrero de 2015

(ahora vivimos en la avenida de tás goulemas y la hija de gemmina está preñada de un niño que nacerá con la sangre espesa y enferma, la sangre del adversario, el hombre sucio con la piel llena de heridas. hay un volvo aparcado desde hace tres años en el sótano del centro comercial, con las ruedas reventadas y un cíclope de restos de metal durmiendo en el maletero, esperando el día del juicio. gemmina cuenta aplicadamente las sílabas de los poemas que escribe mientras el corazón del cíclope retrocede a través del laberinto y parpadea hasta estallar)

(las palabras son haikús y son pequeñas piedras en el suelo, pan caliente entre los dedos)