miércoles, 21 de mayo de 2014

(me duele la cabeza y no soporto que nadie me hable y hurgo con el dedo y los dedos en la oreja izquierda hasta sacar hojas húmedas de roble, un suave cráter en el que cabe un puño y también todos mis gritos de dolor, una mancha que se extiende hacia la cara, la tiñe de negro, tensa la piel sobre el hueso y la grasa, intento calmarme con el bote de insecticida, aspiro fuerte, salbutamol para seguir viviendo)