domingo, 15 de mayo de 2011

enciendo la lámpara del suelo, la televisión, cambio las sábanas y pongo una lavadora, hace un día bonito, me ducho, calcetines rojos, pantalones limpios, camiseta blanca, las venas llenas de sueño, un paso detrás de otro, mi madre me cuenta historias sorprendentes acerca del futuro de la humanidad

(sueño con david y con pilar, él trabaja en una imprenta, maneja con destreza una guillotina, ella ordena papeles de colores. el resto del sueño se pierde al despertar)

(me acuerdo de ella en la ducha, hablamos el viernes pasado, era como estar en la piscina, flotando un poco por debajo de la superficie)