miércoles, 5 de marzo de 2008

ah, sí. la chica con la que fui al cine el sábado me ha llamado hoy sólo para saber cómo estaba. he sonreído, hemos hablado de cosas que ahora no recuerdo y después ha empezado a dolerme algo dentro. un dolor oblicuo y romo que late como si se estuviera desperezando. nos veremos otro día? sí, claro, le digo. cuando quieras. después, he vomitado para adentro, justo como me enseñó juank. nadie se ha dado cuenta: el pan sigue tostándose; betty, dormidísima, respira el aire caliente de la estufa; mi madre cambia de canal buscando no sé qué y yo sólo puedo decir que la culpa de todo es mía. ahora sí, hasta mañana