viernes, 1 de febrero de 2008

imagino una salamandra gigante en el vientre. respira y me mira, resbaladiza y fría, brillante, acomodándose en mi interior. es rosada y lisa como un coño. no quiero mirarla pero sé que está, latiendo mucho

imagino flores creciéndome en el vientre, flores que huelen bonito, de pétalos de colores, que brotan y se desperezan en leves chasquidos de luz. me vuelvo a acurrucar. la próxima vez que respire sólo habrá luz en la habitación

(estuvieron daniel y juank y marina esta tarde aquí. se han ido hace apenas un ratito. siento no tener nada que ofrecerles, hablando de cualquier cosa y riéndonos, sí, pero con las manos llenas de agujeros. daniel me trajo algo de daniel clowes, el twentieth century bola ocho, lleno de dibujos pequeñitos, letra diminuta y neurosis enormísima. juank y marina, la ciencia del sueño, de michel gondry, en dvd, pura poesía hecha imágenes. cuando se fueron, deshice la cama y la volví a hacer)