domingo, 16 de diciembre de 2007

ha habido un incendio porque en aquel bar sólo se habla de ello. he vuelto a coincidir con ana carbó. como si no hubiera pasado el tiempo desde que nos queríamos, nos gusta tocarnos los deditos mientras hablamos. ella lleva un jersey marrón de cuello alto y unas botas preciosas, como de montar. sonreímos. me cuenta de un ascensor que no funciona y, entonces, despierto. tengo la sensación de haber dormido un año entero

ayer, després de un patético intercambio de palabras en el messenger que siguió con tres sms más, borré su contacto y sus números de teléfono. me gustaría haberlo hecho mejor, no haberle hecho todo el daño que le hice. también sé que no puedo cortarme la polla buscando la redención a mis pecados. sólo sé que ya apenas tenemos nada de qué hablar

buenos días y, sí, buena suerte