jueves, 20 de diciembre de 2007

el médico hace esperar largo rato. me pregunta, le respondo, hablamos. estoy a la defensiva al principio. él lo nota y se atraganta. tiene que beber agua. aprovecho para mirar el despacho. hablo con isa en voz baja. me acompaña, me conoce bien. no existen varitas mágicas cuando tienes tanto empeño en autodestruirte, me dice. nos miramos a los ojos y, de repente, me siento vivo, vivo y triste, más que nunca

regresé en tren. me encontré con xavi, mi profesor de latín en el instituto. ahora que se ha jubilado, estudia inglés en la escuela oficial de idiomas. nada cada día, pero se ha engordado quince kilos. nos sentamos juntos. para él son dos paradas y para mí tres. llueve y pienso en resbalarme al andar deprisa, en las gotitas yéndose en la ventana. cuídate mucho y sí, feliz navidad para ti también