lunes, 1 de octubre de 2007

sueno por dentro a catarata o a río. sueno a remolino y a sirena de policía. si me quedo quieto, sueno a lunes y sueno a silencio, a estar mejor, a ganas de estar bien, a ganas de desaparecer. sueno a viajes por selvas y a canciones bonitas de color verde clorofila que canto sin apenas voz

(un trabajo esponja, de esos que te absorben y sólo te devuelven a la vida cuando son las dos, cuando son las seis y media. una semana más, ya ni recuerdo cuántas con la sensación equilibrista de que no me puedo torcer ni un ratito del camino dibujado en un pespunte. la colitis sigue estando, es algo que noto. cero sangre pero un siete y medio en dolor. de noche, a veces es un nueve. pero sonrío y pienso que sí, que ganaré yo)

las caras de todos mis médicos, todas aburridas. una receta no es más que un papel con una firma y un día como éste podría ser el mejor. va, tómate las medicinas. en dos semanas estarás hinchado como una pelota, pero contento, en la barra de tu bar preferido

y no, uno rojo y de neón, gigantesco, en medio del desierto. hasta allí hemos llegado