sábado, 15 de septiembre de 2007

hace unos días fue el cumpleaños de piedad. hoy pensé en felicitarla. después de tanto tiempo sin saber nada de ella, no tiene apenas sentido, pero la gran mayoría de cosas en las que pienso no tienen sentido, o tienen poco

en ese balcón hay una planta de marihuana o un rosal enorme. o ese chico de melena canosa y que come espaguetis sentado en un banco de la plaça castella es el mismo que me ha llamado la atención por la calle pelai. encorvado, con todas las culpas del mundo en su espalda y una bolsa del mare nostrum a su lado. o los tatuajes de ese latin en camiseta imperio, con telarañas en los codos. o quién podría comprarse esos zapatos, ciento treinta y ocho euros de trauma fálico. o en el idioma lejanísimo y boreal que hablan esas dos, muy rápido y alto. o lo suave de esa manta de colores teja. o las palabras de ése que habla en voz alta y al que todo el mundo mira, sucio, rambla arriba, los nombres de los hoteles, lo que hay detrás de cada beso, detrás de cada puerta y de cada maleta esperando un taxi