domingo, 7 de junio de 2015

(un hombre insiste en lanzarse al vacío durante la fiesta de los republicanos irlandeses. una y otra vez, su cuerpo vuela un instante y desaparece por el balcón del octavo piso, se enreda en las cuerdas de nylon verde de los tendederos inferiores, asciende como un ángel y regresa entre nosotros, abrazándonos antes de volver a saltar, ansioso por reventarse contra el suelo)

(o contra las nubes, en una caída de noches enteras que desembocan en preciosas gargantas de azabache, cráteres donde llueve el alma de todas las personas que amo)

(vivíamos en la edad de hielo, nos esforzábamos en romper cada recuerdo: todos esos hombres y mujeres disparando salvas al aire, confiando su alma a un cerdo clavado en un madero, hundiéndose en el mar más profundo que puedas imaginar)