miércoles, 24 de octubre de 2012

(sueño que compro un ordenador pequeño en la tienda del argentino de las camisas floreadas, en la cuesta de la iglesia, justo detrás de la cárcel diminuta donde están encerrados los albaneses que violaron a la niña de las noticias, tatuajes y pesas en el gimnasio para calmar las horas hasta el día del juicio, así, engordando sin parar frente al espejo)