lunes, 5 de octubre de 2009

un lunes que apenas se mueve, como un pez que salta de la pecera y boquea hasta morir en el suelo de la cocina. las horas lentas, el silencio, los trabajos cíclicos y pesados, piedras que empujar cuesta arriba una y otra vez. los primeros días de octubre son calurosos y sudo dentro de la cazadora abrochada. pálido y pesado, me masturbo al llegar a casa, bajo las persianas, preparo té, llamo por teléfono, comunica, llamo por teléfono, comunica, llamo por teléfono y vuelve a comunicar, fin de la partida