sábado, 16 de mayo de 2009

tiendo la ropa al sol. un avión cruza el cielo. el tacto de las sábanas frescas y húmedas. las flores a medio abrir en el alféizar de la ventana. pinzas de plástico y pinzas de madera en el cesto amarillo. pensar en comprar nueces para la ensalada. mi reflejo en la pantalla del portátil de míriam mientras escribo

(a veces tengo miedo de que ella consiga saber qué tengo dentro de mí. intento no dejar pistas, borrar rastros, comportarme de la manera más aséptica posible. sonreír, sí, pero no profundizar en los motivos de esa sonrisa. llorar y pensar que el mundo está lleno de cosas a las que puedes culpar de tus lágrimas)

el sonido de una persiana que se levanta. alguien que sale al balcón. entro en casa. pienso en comprar el periódico. enciendo la televisión y busco un canal de noticias. un bucle en el que nada invita a la esperanza. suena el teléfono. juank y yo hablamos sobre el último capítulo de la serie. sábado, un día perfecto de playa