sábado, 8 de noviembre de 2008

me siento vagamente culpable por escribir las cosas que escribo. pienso en la gente que me conoce y me lee. incombustibles, ellos y ellas siguen ahí, más o menos cerca de mí, sin temor a quemarse. pienso también en la gente que me conoce y no me lee. sería más correcto decir la gente que cree que me conoce. sus cabezas llenas de percepciones planas y líquidas de un tipo que camina lento, que habla lento, que mira mal

de todas maneras, los que de verdad me inquietan son aquellos que me conocen y ignoro si me leen o no. tengo la sensación de estar cada vez más desnudo, de no saber cómo actuar, de no saber qué se espera de mí