sábado, 27 de octubre de 2007

una habitación pequeña, con literas. una luz anaranjada, ruido y discusión en castellano, con un acento que no ubico y mil palabras que no entiendo. no puedo verles, pero son más de tres y están encima de mí. de pronto, un estallido, bang. de la litera de arriba baja una mujer con la boca ensangrentada y una pistola que lanza a la cama de enfrente, que está deshecha. se sienta junto a mí y me dice que se ha disparado en la boca y que ha parado la bala con los dientes. no sé qué decir en ese momento, pero ella ríe y me acaricia las rodillas. despierto de repente con un dolor difícil en el vientre

mejoro tan lentamente que a veces me veo de pie, inmóvil en medio del desierto. buenos días